
Bueno, una vez empezado el curso en serio, nosotras también nos hemos puesto a trabajar en serio y uno de nuestros primeros trabajos ha sido una maqueta del esqueleto humano.
Quería hacer algo visual y táctil, en dimensiones y que, además, fuese de algún modo interactivo, para que no se trate solo de algo que podemos ver, sino que podamos hacer algo con ello.
Lo primero que hicimos fue realizar todos los huesos en plastilina. Lo más difícil fue la calavera, luego, el resto de los huesos fueron tomando forma entre nuestras manos de forma bastante sencilla.
Mi hija pequeña hacía "churros" de plastilina de diferentes grosores que luego iba cortando para que fuese uno o otro hueso y yto, en los extremos les hacía la forma.
Las costillas las realicé con un trozo de cartulina y luego todo eso lo pegamos a un folio de color con silicona caliente.
Una vez estaba la maqueta, el siguiente paso fue pegarla a una bandeja metálica, luego veréis por qué.
En el ordenador, mandé a la niña escribir los nombres de los huesos (es lo que estaban dando en el cole). Se los pedí en castellano e inglés, pero solo fue capaz de hacerlo en inglés.
Luego yo los maqueté y los puse en castellano, a la impresora y ya teníamos tarjetas con los nombres de los diferentes huesos.
Después de eso hice una plastificación casera, ya que no tengo plastificadora (igual debería plantearme comprar una, porque con tanta actividad...) Lo que hicimos fue poner celo por los dos lados y luego... aprovechando unas letras con imanes que tenía por casa, quité los imanes y los pegué a las fichas. Esto sí que lo hice yo solita porque lo pegué con pegamento de contacto.
Mi pequeña fue recortando trozos de pajita y pegándolos a la maqueta con la pistola de silicona para que indicasen qué hueso se señalaba.
Por último, con los rollos de papel higiénico gastados hicimos (o mejor dicho hicieron, ya que lo hicimos en la calle con unos 20 rollos y se juntaron un montón de niños) unas lindas cajitas para guardar las tarjetas pintándolas con acuarelas.
Las costillas las realicé con un trozo de cartulina y luego todo eso lo pegamos a un folio de color con silicona caliente.
Una vez estaba la maqueta, el siguiente paso fue pegarla a una bandeja metálica, luego veréis por qué.
En el ordenador, mandé a la niña escribir los nombres de los huesos (es lo que estaban dando en el cole). Se los pedí en castellano e inglés, pero solo fue capaz de hacerlo en inglés.

Después de eso hice una plastificación casera, ya que no tengo plastificadora (igual debería plantearme comprar una, porque con tanta actividad...) Lo que hicimos fue poner celo por los dos lados y luego... aprovechando unas letras con imanes que tenía por casa, quité los imanes y los pegué a las fichas. Esto sí que lo hice yo solita porque lo pegué con pegamento de contacto.
Mi pequeña fue recortando trozos de pajita y pegándolos a la maqueta con la pistola de silicona para que indicasen qué hueso se señalaba.
Por último, con los rollos de papel higiénico gastados hicimos (o mejor dicho hicieron, ya que lo hicimos en la calle con unos 20 rollos y se juntaron un montón de niños) unas lindas cajitas para guardar las tarjetas pintándolas con acuarelas.
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